Dame otras cosas. Dame puntos de vista. Regálame
otras perspectivas. Obséquiame la posibilidad de sentirme equivocado de nuevo y
cambiar una vez más. Adelanta mi andar, muéstrame lo que no pude ver y dime
otra vez lo que no quise escuchar. Hazme sentir que fui un estúpido insensible,
un desconsiderado de primera, el egoísta de la ocasión. Dame la oportunidad de
verme a mi mismo y decidir un cambio, de verme en un espejo ajeno, y aún así,
muy cercano que se me antoja necesario. Dame el instrumento para impedir el
inútil desgaste y darme cuenta cada vez, otra vez, siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario