Espero que te guste el contenido. Para sugerencias, objeciones, protestas o propuestas, escribe a "leonardo.rothe@gmail.com"

viernes, 2 de diciembre de 2022

Condenados al desespero

La alegría o el bienestar de contar con algo no es ni remotamente igual de intenso al malestar que produce su ausencia. De esa manera, que nos falte el agua, la luz, internet, por ejemplo, se convierte en un aquelarre entre los afectados, aunque el hecho de contar con esos servicios cada día no produce la suficiente alegría o la consciencia de bienestar que empareje la cosa. Viendo tal panorama, estamos condenados a la queja sin contrincante, al malestar victorioso siempre por ocurrir y a quitarnos la cara de aburridos para ponernos la de víctima inconsolable. No es justo. No hay cómo ganar. Hay que trazar una estrategia triunfadora, porque seguro que nos pasa lo mismo con la presencia y la ausencia de nuestra gente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario